¿Dónde y cómo debo postularme para conseguir empleo? 4 pasos para tener éxito

Inicia el día. Te lavas los dientes, desayunas, te cambias, enciendes el computador: es hora de buscar empleo. Estoicamente comienzas a buscar anuncios, llenar formularios y enviar resúmenes curriculares. Dedicas incontables horas al día, durante toda la semana y, al final, antes de dormir, no recibiste ni una llamada. ¿Qué está pasando?

El Director Ejecutivo de Populus Group, Giovanni Magnani, tiene algunas claves que te pueden servir para calmar tu ansiedad y, sobretodo, para aprovechar mejor tu tiempo y hacer más productivo tu esfuerzo.

Sin embargo, lo primero que debes trabajar es tu autoestima: el que no te contacten no significa, ni por asomo, que no seas bueno en lo que haces. En los procesos de selección existen incontables variables que influyen en la decisión final; tu trabajo comienza por ir evaluando y abordando cada uno de estos puntos y, de esta manera, ir optimizando tus postulaciones. Si pierdes la confianza en ti mismo, estarás derrotado antes de comenzar.

¿Cómo debo entonces postular a un trabajo? y ¿Cuáles son las mejores fuentes para encontrar empleo? Giovanni Magnani nos responde (En orden de prioridad):

1.- Redes de contacto.

Sin duda son las más efectivas. A los ejecutivos que desvinculan y los envían a los programas de outplacement (para gestionar su transición) los obligan a tener reuniones diarias de redes ¿Para qué? Para aumentar las probabilidades.

Directamente por email. Para esto tienes que estar en alguna red como Linkedin. No tenemos certeza de que postular por email sea más efectivo, pero tiene una ventaja; puedes tener feedback instantáneo, basta que instales una aplicación como Yesware para saber que pasó con tu correo. Esto te permitirá focalizar la búsqueda y, sobre todo, darte cuenta de que a veces no eres tú, sino el reclutador que simplemente no revisó tu cv.

2.- Avisos de Linkedin.

Tampoco tenemos certeza absoluta que funcionen más que otros portales; pero, dado el valor (US$200) de cada anuncio, pensamos que los reclutadores lo toman más en serio. Además, tiene una gracia: puedes enviar una versión de tu CV u otro documento, por cada postulación, por lo que también podrás personalizar tu postulación.

3.- Portales.

Para nosotros son el último recurso. No hay problema en usarlo, pero de manera controlada. Sabemos que hay empresas que publican anuncios sin tener las vacantes, o incluso teniendo ya la vacante cubierta o simplemente -por alguna razón desconocida- no revisaron los postulantes y el aviso quedó perdido en el (ciber)espacio. De esto se comenta mucho, pero no hay cómo saber si es cierto o no. Hay un post muy antiguo que ya comentaba esta realidad por ahí en 2009. Hace unos días volví a encontrar un comentario similar en Linkedin.

Por eso, otra recomendación es tratar de buscar la misma oferta en Linkedin, tal vez puedes encontrar al reclutador directamente.

4.- "Revisa mi perfil" (Don't do that).

Esto es lo peor. Pensamos que tiene muy baja efectividad, no tanto porque no lo vayan a hacer, sino porque es muy difícil tomar los comentarios e ir clickeando los perfiles. Piensa en un reclutador que pone un aviso. Lo más probable es que tiene su casilla rebalsada de CVs, el perfil de Trabajando.com abarrotado de postulantes, sumado a todos los que llegan por conocidos: ¿Crees que se dará el tiempo para ir uno a uno revisando los perfiles? Y si le parece bien tu perfil, ¿que pasará después? ¿Te mandará un inbox? Es una jugada muy peligrosa.

De esta manera, inicia priorizando tus canales de búsqueda y opciones de vacantes. Esfuérzate focalizadamente. Evalúa los anuncios y busca la mejor manera de presentarte y de llegar al reclutador.